Dirigida a edades a partir de los 13 años de edad, dura alrededor de 95 minutos y cuenta la historia real más que ficticia de una niña y el mundo terrible que la rodea en manos de revoluciones, extremistas religiosos, dogmas y dictadores en el país de Irán. Una amiga me enseñó el libro y me resultó raro ver una novela gráfica, jamás había visto algo parecido. La realización abre una brecha para entender a el país de Irán y el sufrimiento de sus habitantes. Es una historia tensa, que cautiva cuando ven a esta niña tan graciosa, ocurrente e imaginativa, una niña que sueña en convertirse en profeta y oye a los Bee Gees. Crece en medio de la confusión política y el militarismo cruel en su país. Sin embargo, aunque dramática es la trama, la historia es contada con una frescura dinámica, en la que es imposible despegar los ojos ni levantarnos del asiento.
El trabajo tomó aproximadamente tres años en realizarse por el empleo de la técnica tradicional de animación, hecha a mano totalmente y que requiere paciencia extrema. Persépolis es el retrato de muchas personas cuyo país vive dominado por un dogma.
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